El elefante africano de sabana (Loxodonta africana), es un mamífero proboscideo de la familia de los elefántidos.​ Es el mayor mamífero terrestre que existe en la actualidad, se los puede reconocer por sus enormes orejas, que tienen una forma parecida a la del continente africano.

Las patas traseras tienen 3 dedos en forma de pezuña, mientras que el número de dedos en las delanteras varía entre 4 y 5 según los ejemplares. Cuando se mueven, lo hacen a razón de unos 6 km/h a paso firme, pueden correr hasta los 40 km/h.

La trompa del elefante en realidad es una larguísima nariz que sirve para oler, respirar, barritar, beber y agarrar cosas, especialmente las que se pueden comer. Solo en la trompa tienen unos 100.000 músculos diferentes.

Tienen 2 protuberancias parecidas a dedos en el extremo de la trompa que les permiten agarrar objetos pequeños.

Tanto los machos como las hembras tienen colmillos, con los que cavan en busca de agua y comida, y también los usan para arrancar la corteza de los árboles. Los machos usan los colmillos para luchar entre sí, pero el marfil también ha atraído una violencia mucho más peligrosa.

Comen raíces, hierba, fruta y corteza, y lo hacen en grandes cantidades. Un elefante adulto puede consumir hasta 135 kilogramos de comida en 1 solo día.

El embarazo de las elefantas dura más que el del resto de mamíferos, casi 22 meses. Suelen dar a luz una cría cada 2 o 4 años. Al nacer, los elefantes ya pesan unos 90 kilogramos y miden un metro de alto.

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