El arco de medio punto, en arquitectura, es un tipo de arco cuya superficie interior llamada intradós) hace la forma de un semicírculo.​ Es un elemento principal de la arquitectura abovedada.

Antiguamente solía estar conformado por piezas semiradiales de adobe, ladrillo o piedra (las llamadas dovelas). Se ha utilizado para construir bóvedas, puertas, ventanas, y también puentes y acueductos sobre arquería.

Comenzó a emplearse en Mesopotamia (arquitectura caldea) en el tercer milenio a. C. Su uso pasó a la arquitectura etrusca, y de esta a los romanos. Es un tipo de arco muy típico del arte romano y, por consiguiente, de todos los estilos que derivaron de él: románico, renacentista, barroco...

Variantes del arco de medio punto:

- Arco rebajado: su forma es más "aplastada", bien por no ser un semicírculo (arco carpanel), bien por tener el centro geométrico por debajo de la línea de impostas (arco escarzano).

- Arco peraltado, es un arco ampliado mediante la inclusión de dovelas colocadas por encima de la línea de impostas.

- Arco parabólico: fue empleado por los hititas y recuperado por Gaudí en el siglo XIX, aunque con diseño ligeramente diferente.

Desde el punto de vista de la resistencia de materiales, la geometría y características de un arco de medio punto hace que todos sus puntos trabajen en compresión. Cada dovela tiene un estado similar al de una cuña comprimida en sus caras laterales.

Más información: es.wikipedia.org