Las banshees forman parte del folclore irlandés desde el siglo VIII. Son espíritus femeninos que, según la leyenda, se aparecen a una persona para anunciar con sus llantos o gritos la muerte de un pariente cercano. Son consideradas hadas y mensajeras del otro mundo.

La banshee se suele describir en la tradición gaélica vistiendo de verde o rojo, normalmente con una melena larga y despeinada (normalmente descrita como rojo o naranja, y amarillo en tiempos medievales, describiéndose que brillaba como el fuego salvaje).

Puede aparecer en distintas formas. Quizás, la más común es la fea vieja espantosa, pero también puede elegir aparecer como una joven y bella. En algunas leyendas, la figura que parece ser en primera instancia una banshee u otra cailleach (bruja) resulta ser la diosa irlandesa de la batalla, Morrigan.

Acostumbran a llevar un vestido generalmente de color gris o blanco, que va desvaneciéndose en la parte baja por lo que no se le observan las piernas; ese color del vestido la ayuda a difuminarse cuando deambula por las colinas.

Según la leyenda, la banshee aparece solo en la noche, no es posible verla físicamente, pero se deja oír. Sin embargo, cuando se deja ver se presenta como una lavandera restregando ropa con manchas de sangre, como una inquietante sombra que se mantiene a lo lejos o puede aparecer también aseándose en un río o cepillándose el cabello.

Más información: es.wikipedia.org