Málaga-Pablo Picasso​ es un aeropuerto español situado a ocho kilómetros del centro de la ciudad. En septiembre de 2019 cumplió 100 años, convirtiéndose en el decano de los aeropuertos españoles.

La historia del aeropuerto de Málaga comenzó a principios del siglo XX, cuando el francés Pierre Latécoère buscaba terrenos en España para la construcción de diversos aeródromos. Y es que este ingeniero y empresario de la aviación francesa, estaba buscando la conexión entre Francia y sus colonias de África a través de España.

El 9 de marzo de 1919, Latécoère aterrizó en un avión Salmson 2A sobre la zona denominada "El Rompedizo", hoy Aeropuerto Internacional de Málaga. Algunos meses más tarde, en septiembre de ese mismo año, se inauguró la primera línea comercial entre Toulouse y Casablanca, con escala en Málaga.

Tras unos años operando como aeródromo, en 1937 pasó a ser base aérea. Y era aquí donde se encontraban las escuelas de Observadores, Tripulantes y Especialistas del Ejército del Aire.

En 1946, el aeropuerto fue abierto al tráfico aéreo nacional e internacional, clasificado además como aduanero. Inicialmente, los pasajeros fueron atendidos en sus dependencias hasta que en el año 1948 se inauguró la primera terminal civil para los pasajeros.

El aeropuerto de la Costa del Sol vivió su principal boom en los años 60, cuando era la puerta de entrada de los turistas extranjeros a España. Ha crecido de forma ostensible con distintas ampliaciones en 1982, 1991 y 2010.

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