Marco Aurelio Antonino Augusto fue uno de los emperadores romanos más recordados y populares de la historia. Gobernó desde el año 161 hasta el año de su muerte en 180, siendo el último de los llamados Cinco Buenos Emperadores.

Se lo apodó el sabio por su gran formación cultural y filosófica, era partidario del estoicismo, una doctrina filosófica que estaba basada en el dominio y control de los hechos, cosas y pasiones que perturban la vida, valiéndose de la valentía y la razón del carácter personal, y cuyo objetivo era alcanzar la felicidad y la sabiduría prescindiendo de los bienes materiales.

Durante toda su vida se dedicó a escribir reflexiones y pensamientos que luego serían volcados y sistematizados en la obra Pensamientos, que justamente relata sus ideas y demuestra esa inclinación estoica.

Su gobierno estuvo marcado por los conflictos militares en Asia frente a un revitalizado Imperio parto y en Germania Superior frente a las tribus bárbaras asentadas a lo largo del Limes Germanicus, en la Galia y a lo largo del Danubio. Durante el período de su imperio tuvo que hacer frente a una revuelta en las provincias del este liderada por Avidio Casio, la cual aplastó.

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