En 1996 se comenzó la planificación del que será sucesor del telescopio espacial Hubble. El nuevo telescopio llevará el nombre de quien fuen el segundo administrador de la NASA (1961-1968), James E. Webb (1906-1992), conocido por su papel en el programa Apolo y el establecimiento de la investigación científica como una actividad central de la NASA.

El proyecto representa una colaboración internacional de cerca de 17 países; está siendo construido y será operado de manera conjunta por la NASA, la Agencia Espacial Europea y la Agencia Espacial Canadiense. El proyecto Fue originalmente conocido como Next Generation Space Telescope o NGST.

En 2011, cuando ya habían sido gastados cerca de 3000 millones de dólares y con más del 75 % de su hardware ya en producción o en fase de pruebas, el Congreso de los Estados Unidos analizó la posibilidad de cancelar el proyecto, decidiendo finalmente poner un tope de financiación adicional para completarlo, fijado en 8 000 millones de dólares.

Según el cronograma actual del proyecto, está previsto que sea lanzado por un cohete Ariane 5 en mayo del 2020 desde la Guayana Francesa.

La misión del nuevo telescopio tiene cuatro objetivos principales:

Buscar la luz de las primeras estrellas y galaxias formadas tras el Big Bang

Estudiar la formación y evolución de las galaxias

Comprender mejor la formación de estrellas y planetas

Estudiar los sistemas planetarios y los orígenes de la vida

Más información: es.wikipedia.org