El 31 de mayo de 2009 el vuelo 447 de Air France despegó de Río de Janeiro en ruta hacia París. Unas pocas horas después, cuando cruzaba el Atlántico, le indicó su posición al centro de control.

Casi 2 años después se recobraron los restos del accidente, la mayoría de los cuerpos y las grabadoras de voz y datos. Las 228 personas a bordo murieron.

En 2012, las autoridades francesas dijeron que una falla en el sistema utilizado para determinar la velocidad del avión hizo que el piloto automático se desconectara. El avión se estrelló en el océano.

En 2014 el vuelo 370 de Malaysia Airlines desapareció luego de una hora de vuelo, en ruta a Pekín. No hubo llamadas de alerta antes de perder el contacto con el avión sobre el mar entre Malasia y Vietnam. Equipos de búsqueda de varias naciones buscaron infructuosamente rastros del avión sin encontrar nada. El misterio que rodea al destino del avión y de los 239 pasajeros a bordo, ha desconcertado a funcionarios del gobierno y a expertos en la aviación.

El "vuelo 19" designa una misión de 4 bombarderos de la marina de USA que desaparecieron sin dejar rastros, en el denominado "Triángulo de las Bermudas" el 5 de diciembre de 1945.

En 1937 Amelia Earhart desapareció volando sobre una isla del Pacífico, mientras buscaba quebrar un récord: dar la vuelta alrededor del mundo. Después de gastar 4 millones de dólares y buscar en 402.335 kilómetros cuadrados de océano, Estados Unidos detuvo su búsqueda.

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