El ámbar gris es una secreción producida por el cachalote. Se cree que los cachalotes generan la secreción para facilitar el tránsito de objetos duros o afilados ingeridos por los cetáceos.

De color gris mate o negruzco, con tonalidades variadas como el mármol. Tiene un olor peculiar dulce y terroso parecido al del alcohol. Su textura es similar a la de la cera y su aspecto similar a un trozo de roca marina.

Usado antiguamente en ceremonias religiosas, como afrodisíaco en Medio Oriente, delicatessen en China o como ingrediente en pociones de medicina tradicional, hoy día esta sustancia es utilizada mayormente en la industria del perfume.

Desde hace siglos, el ámbar gris ha sido considerado un producto de lujo. El kilo de la sustancia suele pagarse a 50 000 euros. Aunque normalmente no supera 200 o 300 g pueden encontrarse trozos más grandes.

El ámbar gris puede encontrarse en las costas de Brasil y Madagascar, de África, las Indias, la China continental, Japón, India, Australia, Nueva Zelanda y las Islas Molucas. También se puede encontrar en otras localizaciones geográficas fruto de las corrientes marinas.

El trozo documentado más grande es el hallado en un cachalote cazado en 1912, y que arrojó un peso de 4.52 kilogramos. En 2016 un pescador de Omán mostró su particular hallazgo de 75 kilogramos, con el que recibió algo más 2.6 millones. En Mallorca, dos jóvenes encontraron en una cala un kg del preciado ámbar, con el que podrían recibir 50 000 euros.

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