La Cascada Svartifoss, se le conoce con el nombre de Cascada Negra. Está ubicada en el Parque Nacional Skaftafell en Islandia, situado a 320 kilómetros de Reykiavik, la capital de ese país.

Es uno de los numerosos saltos de agua en el sur de Islandia, pero presenta una peculiaridad que la hacen única y especial: las columnas hexagonales de piedra basáltica negra que la rodean y que le otorgan un aspecto de órgano de catedral.

La formación de las columnas se debe al rápido proceso de enfriamiento que sufrió el material volcánico del que se componen.

Es un lugar muy visitado por los turistas por la belleza que ofrece a sus visitantes.

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