El Quetzal que pertenece a la familia de los trogones, es un ave que habita los bosques nubosos de Centroamérica y sur de México.

La palabra quetzal es de origen nahualt, era considerado por las civilizaciones precolombinas de Mesoamérica como un ave divina asociada a Quetzalcóatl, la “serpiente emplumada”. Los antiguos mexicas y mayas vieron al quetzal como el “dios del aire” y como un símbolo de la bondad y la luz. Sus plumas de color verde fueron veneradas como símbolos para el crecimiento de las plantas en la primavera

Una de las particularidades del ave, es que tanto el macho como la hembra dedican el mismo esfuerzo a la incubación y la crianza. El macho es un buen padre, le preocupan sus crías y les dedica tiempo.

El quetzal se alimenta de algunos insectos, pero lo que más le gusta son las frutas que, como muchos de los animales que viven en el bosque de niebla, toma de los árboles como el laurel y el de mora y sobre todo, el fruto del árbol de aguacates silvestres.

El quetzal es símbolo de libertad, de independencia y de autonomía. Fundamentalmente el pájaro simboliza la espiritualidad, el alma, los estados superiores del ser, que prisionera del cuerpo, vuela de este mundo después de la muerte.

El Quetzal fue declarado Ave Nacional de Guatemala, según el Decreto No.33 del 18 de noviembre de 1871 y cada 5 de septiembre se conmemora su día nacional.

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