El cigarro puro o simplemente puro (también llamado cigarro, habano o túbano) es un paquete firmemente enrollado de tabaco secado y fermentado. Se producen en una amplia variedad de tamaños y formas. Desde el siglo XX, casi todos los cigarros están hechos de tres componentes distintos: el relleno, la hoja de ligadura que mantiene el relleno unido, y una hoja de envoltura, que es a menudo la mejor hoja utilizada. A menudo poseen una cinta impresa con el logo del fabricante del cigarro.

A diferencia de un cigarro puro, los cigarrillos son de tamaño uniforme y cada uno contiene menos de 1 gramo de tabaco. En el caso de los cigarrillos estadounidenses, estos son hechos con distintas mezclas de tabaco, las cuales nunca son fermentadas, y están envueltos en papel. En general, se necesitan menos de 10 minutos para fumar un cigarrillo estadounidense.

El humo del cigarro puro, como el humo del cigarrillo, contiene sustancias químicas tóxicas y carcinógenas que son perjudiciales tanto para los fumadores como para quienes no fuman. El humo del cigarro puro, posiblemente, es más tóxico que el humo del cigarrillo.

Fumar cigarros puros causa cáncer de la cavidad oral, de laringe, de esófago y de pulmón. Puede causar también cáncer de páncreas. Además, quienes fuman cigarros puros todos los días, particularmente fumadores que inhalan el humo, tienen un mayor riesgo de padecer enfermedades cardíacas y otros tipos de enfermedades pulmonares.

Más información: www.cancer.gov