Los jiráfidos (Giraffidae) son una familia de mamíferos artiodáctilos que incluye dos especies actuales, distribuidas en África: la jirafa y el okapi.

Los okapis pueden ser animales huidizos y evasivos, por lo que los trabajos de investigación que se llevan a cabo sobre la especie suelen limitarse a recoger muestras de excrementos u otros signos que evidencien su presencia.

Aunque las dos especies habitan hábitats muy diferentes, ambas se alimentan a un nivel superior al de cualquier otro herbívoro terrestre simpátrico.

Los okapis tienen un cuello largo y orejas grandes y flexibles. El pelaje es de color chocolate a marrón rojizo, que contrasta con las rayas horizontales blancas y los anillos en las patas y los tobillos blancos. Las llamativas rayas lo asemejan a una cebra.

Tanto la jirafa como el okapi poseen una lengua larga y prensil con la que consumen hojas, que constituyen la dieta principal de ambas especies.

Los jiráfidos evolucionaron a partir de un grupo de ungulados a principios del Mioceno casi 25 millones de años atrás. Formaban parte de una diversificación de mamíferos relativamente tarde que también produjo el ganado, antílopes y ciervos después de un cambio climático que transformó subtropicales bosques abiertos en la sabana y las praderas.

Más información: reinoanimalia.fandom.com