De todas las historias del Antiguo Testamento, la más conocida es sin duda la del Éxodo. Ésta cuenta cómo los israelitas lograron escapar de Egipto guiados por Moisés, mientras el Faraón y su ejército trataban inútilmente de alcanzarlos. Algunos la conocen por haberla leído en la Biblia. Otros, por haberla aprendido en el catecismo. Pero ha sido Hollywood quien la ha inmortalizado en la célebre escena de la película “Los Diez Mandamientos”, en la que un impecable Charlton Heston (en el papel de Moisés) logra con su bastón abrir espectacularmente las aguas del Mar Rojo, y formar con ellas dos inmensos diques a ambos lados para que los hebreos puedan huir de sus perseguidores egipcios.

Este suceso es considerado por los israelitas como el acontecimiento más importante de toda su historia, ya que a partir de ese momento Israel habría comenzado a existir como pueblo. Fue su “día de nacimiento”. Y el recuerdo de este episodio se volvió tan importante para el pueblo judío, que todo padre de familia debía enseñar a su hijo desde pequeño a repetir: “Nosotros éramos esclavos del Faraón en Egipto, y Dios nos sacó de allí con gran poder” (Dt 6,21); “Los egipcios nos maltrataron, nos oprimieron y esclavizaron. Pero clamamos a Dios, y Él nos escuchó y nos sacó de Egipto con su poder, haciendo cosas extraordinarias” (Dt 26,6-8).

Más información: en.wikipedia.org