La bandera de Nueva Zelanda, como muchas banderas de dependencias británicas, consta de un paño azul, con la bandera del Reino Unido en su cuarto superior izquierdo y cuatro estrellas rojas con ribetes blancos que representan la constelación de la cruz del sur.

El parecido que tiene este estandarte con el de Australia, ha ocasionado más de un inconveniente entre las naciones más grandes y representativas del continente de Oceanía; la diferencia radica en el color y número de estrellas, pero los neozelandeses argumentan que ellos adoptaron primero el diseño, por lo que los australianos deberían buscar un diseño distinto.

La historia del pabellón de Nueva Zelanda, se remonta a 1834, cuando debido a la detención de un barco de carga de este país, por parte de las aduanas de Sidney, por estar navegando sin bandera, y fue adoptada oficialmente en 1902.

Se ha propuesto en diversas ocasiones cambiar la bandera neozelandesa para adoptar un nuevo diseño. Entre los argumentos a favor del cambio, se destaca el que la bandera actual ignora el legado maorí y de los otros pueblos de la nación. Así también entre los argumentos para mantenerla, el principal es que la bandera ha sido utilizada durante mucho tiempo y que muchos neozelandeses han luchado por defender, y que cambiarla sería una ofensa para ellos. Entre noviembre de 2015 y marzo de 2016 se llevaron a cabo dos referéndums acerca de este cambio de bandera, que concluyeron en mantener el ejemplar actual.

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