Sargón de Acadia o Sargón de Acad, también conocido como Sargón el Grande (desconocido–2279 a.C) ​​ fue la primera persona de la historia registrada en crear un verdadero imperio: el Imperio acadio. Su descendencia gobernó Mesopotamia durante el siguiente siglo y medio.

Su nombre significaba "rey verdadero", y aprovechó esa supuesta legitimidad para establecer el primer imperio del mundo alrededor de 2 330 a.C. en Mesopotamia, la fértil tierra entre los ríos Tigris y Éufrates.

Él y sus sucesores legaron al mundo un concepto de poder que implicaba más que la fuerza militar. Se ganó obediencia, imponiendo orden, dispensando justicia y actuando como representante terrenal de dioses que sus súbditos temían y veneraban.

Según la leyenda, Sargón de Acad nació en secreto de una madre sacerdotisa que lo dejó a la deriva en un río, donde fue encontrado por un campesino que lo crió.

En su juventud, Sargón fue «visitado» por Ishtar, diosa del deseo, la fertilidad, las tormentas y la guerra. Inspirado por ella, se levantó de la oscuridad y conquistó el mundo.

Los acadios habían sido durante mucho tiempo inferiores a los sumerios, cuya civilización al sur de Acad, en Mesopotamia, había prosperado durante un milenio. Aprendieron mucho de los sumerios antes de emerger primero como sus rivales y finalmente como sus gobernantes.

El rey Sargón gobernó durante más de medio siglo y fundó una dinastía que se mantuvo firme durante el reinado de su nieto, Naram-Sin.

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