A pesar de la lucha que inicialmente parece estar yendo bien, Ricardo III, pronto se encuentra solo en medio del campo de batalla, y llora desconsoladamente implorando "Un caballo, un caballo, mi reino por un caballo".

Finalmente es derrotado después de un combate cuerpo a cuerpo con Richmond, quien lo mata con su espada.

Ricardo III, es una tragedia de William Shakespeare, la última obra de su tetralogía sobre la historia de Inglaterra. Después de Hamlet, es la pieza más larga del dramaturgo.

La primera representación de la que se tiene constancia se produjo el 17 de noviembre de 1633, con presencia de Carlos I y Enriqueta María.

El estudio de los huesos de Ricardo III (1452-1485), muestra hasta once heridas causadas por diversas armas medievales justo antes de morir, nueve de ellas en el cráneo. Una herida grave, detectada en la pelvis, habría sido infligida cuando ya había fallecido.

Las lesiones en la cabeza confirman los relatos de la época, según los cuales el 22 de agosto de 1485, se vio atrapado en la batalla de Bosworth y abandonado por su caballo combatió pie en tierra, donde fue asesinado por sus enemigos.

Tenía 32 años y solo dos en el trono.

En el libro se detallan una a una las lesiones en los huesos y las suposiciones sobre las armas que emplearon sus contrincantes (espadas, lanzas, cuchillos, dagas)

La muerte del rey, significó el fin de la casa de York y dejó el trono en manos de Enrique VII, el primero de la dinastía de los Tudor.

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