Si has estado cerca de un bebé recién nacido habrás notado que en la mayoría de los casos lloran, pero no les salen lágrimas. La razón de esto es que en muchas ocasiones los conductos lagrimales de los bebés todavía están en desarrollo, y es normal que no derramen lágrimas durante los primeros meses. Aunque la mayoría de los bebés empiezan a llorar lágrimas después de 2 semanas de edad, a otros les toma más tiempo.

Los bebés experimentan emociones incluso dentro del útero materno, por lo que el que llore sin lágrimas no significa que esté fingiendo. Después, al nacer, el llanto es durante un tiempo la forma más práctica e inmediata que tiene el bebé de comunicarse.

El bebé es totalmente dependiente de sus progenitores o tutores, necesitando de su atención para poder satisfacer sus necesidades básicas o para realizar actividades elementales. Ante cualquier necesidad o incomodidad, el bebé llorará para atraer la atención de los adultos.

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