Los hoyuelos de Venus son dos pequeños huecos o depresiones que se forman a ambos lados de la parte baja de la espalda, justo en la zona de las lumbares.

Su nombre informal tiene su origen en Venus, la diosa romana del amor, la belleza y la fertilidad, y tal vez por ello se les ha otorgado cierto valor sexual y estético, convirtiendo esta característica fisiológica en objeto de deseo e, incluso, de fetichismo.

Su presencia o no en el cuerpo de las personas tiene su razón de ser en la genética. Por tanto, también es una característica que pueden poseer los hombres, aunque en su caso reciben el nombre de ‘hoyuelos de Apolo’, en homenaje a la deidad romana de la luz y del sol.

Como se encuentran en una zona en la que no existen músculos, su visibilidad es mayor cuanto menos grasa acumulada existe en la región lumbar, por lo que su presencia también se asocia con una figura más saludable, aunque toda relación entre estos hoyuelos y la salud se limita a este aspecto.

Más información: www.webconsultas.com