Volvas, así eran nombradas las brujas, hechiceras, chamanes y sacerdotisas en la mitología nórdica. Pero también, en algunas regiones eran conocidas como «Wicce» y de aquí derivaron al inglés «Witch». Völva significa literalemente "que lleva la vara o bastón mágico", una de las principales características de estas brujas, su vara.

Su magia estaba basada en la magia rúnica, procedente de las runas vikingas. Según la mitología nórdica, las völvas solían ser mujeres (rara vez había hombres que practicasen dicha magia) y ancianas, sin lazos ni ataduras familiares.

Estás viajaban por todo el territorio, acompañadas por aprendices más jóvenes, para ofrecer su magia, visiones y profecías a aquellos que lo necesitasen. Nunca se separaban de su vara y vestían un manto azul oscuro o negro.

Se dice que las Völvas participaban en las batallas directamente y que influían en el curso de la batalla, puesto que solían servir al señor de la guerra mientras las necesitaba y su poder era enorme si se confiaba en ellas.

En Escandinavia se han descubierto 40 tumbas de mujeres enterradas junto a una vara y rodeadas por ofrendas.

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