El arrayán es una especie arbórea siempreverde de la familia de las mirtáceas. Crece principalmente en los bosques templados de Chile y Argentina, en especial junto a cursos de agua. La corteza es de color castaño cuando el árbol es joven y anaranjado cuando es adulto; está cubierta por una capa de textura pilosa y sedosa que se desprende al contacto. Los colonizadores españoles lo llamaron arrayán por la semejanza de sus flores con las del arrayán europeo o mirto.

En la mayor parte de su área de distribución crece como un arbusto muy ramificado, de unos 3-5 m de altura; pero en ciertos lugares como el parque nacional Los Arrayanes (Neuquén, Argentina) existen bosques donde alcanzan hasta 20 m de altura y 1 m de diámetro. Su crecimiento sin embargo es muy lento, y se dedica especial protección a los renovales para evitar su destrucción accidental por los visitantes.

El Parque Nacional Arrayanes de la provincia de Neuquén, Argentina, es famoso en el mundo. Es el único de su dimensión que queda luego que desapareció el que se encontraba en Japón. Hoy se constituyó en un área protegida por la importancia de su especie y la variedad de la vida autóctona.

El nombre científico del Arrayán es Myrceugenella apiculata. Se estima que estos árboles nativos tienen alrededor de 300 años.

A título de curiosidad vale mencionar que en La Alhambra de Granada existe un "Patio de los Arrayanes" con un estanque o alberca en el centro rodeado de plantaciones de arrayanes (o mirtos).

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