Cabo Verde es un estado soberano insular de África, situado en el océano Atlántico, frente a las costas senegalesas. Su territorio está organizado en 22 concelhos o municipios. Su capital y ciudad más poblada es Praia.

Las diez islas que lo conforman permanecieron vírgenes hasta que hace unos 550 años comenzaron a llegar los primeros seres humanos al archipiélago.

Su lengua oficial es el portugués y el país es miembro de la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa.

Su posición geoestratégica era de gran importancia como puerto transitorio hacia América o Asia, pero Portugal quería convertir Cabo Verde en una colonia rica y próspera, que generase riqueza por sí misma para la metrópoli.

La Corona portuguesa otorgó a todos los colonos permisos para traficar con esclavos que vivían en la isla de Santiago; rápidamente, esta actividad se convertiría en el principal motor económico de las islas. El centro neurálgico del comercio de esclavos fue la capital por aquel entonces, la primera ciudad construida por europeos en las colonias tropicales.

Los barcos negreros desembarcaban allí con centenares de esclavos provenientes de las costas de Guinea y Sierra Leona, que se vendían a los colonos en lo que se ha definido como “hipermercados” de esclavos, una auténtica compraventa de seres humanos que marcó por completo la historia del país y que tuvo su mayor auge en el período que transcurre desde el siglo XVII hasta la abolición de la esclavitud en las islas, en 1876.

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